En los últimos años hemos escuchado mucho la frase “bienestar animal”
Y casi todos pensamos de manera inmediata que se trata de que nuestra mascota este bien, así nada más.
Mi perro lo veo comer hacer sus necesidades fisiológicas y ladra, está bien.
El gato lo veo que entra, sale,y come, pues también está bien.
Y si es un animalito silvestre, veo que todavía se mueve, ah pues entonces está bien.
No estimado lector.
Primero entendamos qué es bienestar animal:
Es la capacidad que tiene el o los animales, para adaptarse al medio en que vive.
Ya sea silvestre o mascota de casa.
Lo hemos dicho en otras ocasiones el crecimiento de la mancha urbana ha transformado el hábitat natural, ahora es una enorme plancha de concreto, obligando a especies silvestres a coexistir en un medio no propicio para ellos, y que los ha obligado a buscar nuevas alternativas para sobrevivir.
Gracias a la poca conciencia humana muchos son capturados, en ese afán de dominar, de pertenencia absoluta, llevándolos a la muerte por cautiverio.
Aquí no existió el bienestar animal.
La ignorancia del ciudadano y la falta de un programa de captura y reinserción a donde pueda existir este bienestar animal, es ya una prioridad, pero como los animales no generan Votos pues ahí seguirán.
Aunque tenemos en el municipio áreas verdes toralmente abandonadas que bien podrían servir como santuario para algunas especies.
Pero los tecnicismos políticos o burócratas tiran al suelo una opción factible.
¿Qué ocurre con nuestras mascotas de casa, llámese gato, perro, conejo, etcétera?
En qué parte entramos los humanos, siendo que somos el eslabón más grande dentro de la cadena alimenticia y, la especie “pensante”
Somos los que debemos de proporcionarle a los animales las condiciones idóneas para su coexistencia, porque ahora dependen de nosotros.
Nosotros estamos invadiendo sus áreas naturales.
Nosotros los estamos exiliando de su área de bienestar animal.
Nosotros debemos de asumir la responsabilidad de darles el tan llamado “bienestar animal”
Proporcionándoles un área, alimentación, los cuidados necesarios, mismos que se verán reflejados en el equilibrio de salud y emocional de dicho animal, sea la especie que sea.
Pero ojo: también se debe de tener el personal con real empatía, profesionalismo, ética, conocimiento, hacia la vida animal, no ver esta línea como un cheque en blanco.
En cuanto a tu mascota ¿sabes qué vacunas tiene, donde está su cartilla, cuándo lo llevas a un chequeo médico veterinario?
No solo es darle comida y agua insisto, es darle las herramientas necesarias para su desarrollo y calidad de vida de acuerdo a su especie.
El animalito silvestre que capturaste ¿sabes cuál es su alimentación, qué enfermedades trae? Porque recuerda que existe la zoonosis. Y si este animalito ¿tiene una de las tantas que afectan al humano? ¿Lo llevaste con un médico veterinario?
A tu mascota dale más tiempo de calidad, que no sea el típico perro de azotea, o de balcón de 1metro, por 3 metros. No es justo.
Al animalito silvestre si lo ves en riesgo y lo puedes salvar, hazlo y llévalo a un área donde veas vegetación, agua, y libéralo.
¡¡No te lo lleves a su casa!!
Prediquemos con el ejemplo:
Y si rescatas cierra el círculo, no lo dejes abandonado en otro sitio inapropiado para el.
Bienestar animal con conciencia.
Por una vida animal digna
MVZ Amílcar J. Meza Rdguez.
El Arca Wamerú