El tema del Regidor Sebastián Cano, quien tiene señalamientos y acusaciones por haber cometido presunto acoso, sigue dando de que hablar, y aunque múltiples abogados, han señalado que es un tema que solo la Fiscalía General del Estado, puede aclarar y llevar, el Ayuntamiento de Veracruz que encabeza Patricia Lobeira, tomó acciones que podrían derivar en perjudicar los supuestos casos que afirman defender.

 

El pasado 31 de marzo al puro estilo, Acción Nacional, pasaron dos cosas, por la mañana, un grupo de mujeres sin identificarse, que según las redes de los colectivos feministas, no pertenecen a ninguna agrupación feminista, pero iban casualmente uniformadas con blusa púrpura y gorra verde, acudieron a bandalizar sin que autoridad alguna lo interpusiera, una pared y puerta en contra del Regidor, aunque esa oficina no es suya, pero al parecer la idea era generar el escándalo para que eso dijeran las notas periodísticas del día.

 

Lo que si impidió personal municipal fue la antrada del Regidor a la sesión de cabildo, ese mismo día por la tarde, en la que, de manera unilateral la Alcaldesa Patricia Lobeira determinó decidió, sin argumento legal, quitarle las comisiones a Sebastián Cano, entre ellas, la del Carnaval, ojo al dato, y distribuirlas entre otros Ediles.

 

Y antes de que venga el inteligente, nadie está diciéndo que que lo que presuntamente hizo Sebastián Cano, no pasó, eso es algo que debe determinar un Juez, en un proceso legal, cosa que no ha ocurrido, por lo que, y ante ese hecho, hay un derecho que defienden las autoridades federales y estatales, de violarse podría derivar en sanciones para el Ayuntamiento, la Alcaldesa, Belém Palmeros Exsome, Regidora promotora de la situación, e incluso perjudicar el caso que ellos aseguran que defienden, la presunción de inocencia.

 

Mientras no exista una determinación de un Juez, Sebastián Cano tiene que ser tratado como inocente hasta que se demuestre lo contrario, pero el Ayuntamiento tomó postura,y al igual que cuando arrancó la administración municipal, sin consultar e imponiendo le quitaron las comisiones a Sebastián, y se las dieron a otros Ediles.

 

El caso de las supuestas denuncias de acoso, podrían acabar mal para las presuntas victimas, al haber una autoridad local tratando al Regidor cómo culpable, sin que el proceso siquiera inicie, en este caso Patricia Lobeira y sus regidores a fines.

 

Recordando que al principio de la administración, la alcaldesa Lobeira determinó repartir como (se dice sin pruebas pero sin dudas, que por indicación de su marido, el fallido candidato a la gubernatura Miguel Ángel Yunes Márquez) las Regidurías, estableciendo que solo un edil las conformará sin otros que la integren, el viernes le dió la comisión del Carnaval de Sebastián Cano a Luis Enrique Beltrán Calderón, Regidor Cuarto.

 

Efectivamente, no le suena este fulano, es porque no ha hecho nada como Edil, y en lugar de poner a alguien con experiencia en el sector Empresarial y Turístico para llevar el Carnaval cómo Daniel Martín Lois, Regidor Octavo, pusieron al exsecretario de un exregidor de la administración de Fernando Yunes, es decir, no sabe nada, su experiencia es nula, el y nada son lo mismo.

 

Ahora tendría sentido porqué el Ayuntamiento del PAN violó la presunción de inocencia, para tener a un levanta dedo más en una comisión con mucho dinero. El "pollo" Pérez Fraga está de adorno y fue hecho a un lado: su presidencia del comité pende de lalfileres y es muy posible que este sea su último año de un "carnaval" sin sentido porque ya no se hizo previo a la Semana Santa, como es tradición y sólo será una fiesta de borrachera y excesos para turistas próximamente.