La adquisición de bienes inmuebles con la finalidad de colocarlos en alquiler a través de plataformas en línea está experimentando un notable incremento.

Cada vez más individuos eligen invertir en bienes raíces no solo como residencia permanente, sino también como activos destinados al arrendamiento en plataformas de alquiler a corto plazo, según señaló Joel Hernández Garrido, ejecutivo del sector hipotecario.

Este fenómeno se ve impulsado por la popularidad de servicios como Airbnb y Booking.com, que brindan a los propietarios una manera eficiente de gestionar y rentabilizar sus propiedades. Aquellas ubicadas en zonas turísticas o estratégicas son particularmente buscadas, atrayendo a viajeros y turistas en busca de opciones de hospedaje más personalizadas.

“Muchas personas que tienen la oportunidad de poder ver y ampliar su panorama de inversión adquieren propiedades de contado o a crédito y se le da rendimientos a través de las rentas en aplicaciones”.

Un elemento fundamental en este fenómeno radica en la creciente solicitud de comodidades y servicios que aumentan el atractivo de estas propiedades para los arrendatarios.

Desde piscinas y gimnasios hasta espacios para trabajar de forma remota, las amenidades desempeñan un papel crucial en la elección de los viajeros y posibles inquilinos. Este cambio en la dinámica del mercado inmobiliario resalta la capacidad de adaptación de los propietarios al capitalizar las oportunidades en el entorno digital.

“Son propiedades que tienen amenidades, es decir, están en clúster, dan seguridad, esparcimiento, son privadas, con alberca o como clubs. Todo eso ayuda mucho a esas propiedades pensadas para este aspecto”.

La adquisición de bienes raíces con el objetivo particular de generar ingresos mediante plataformas de alquiler refleja un cambio en las tácticas de inversión inmobiliaria, impulsado por las preferencias cambiantes de los consumidores y las nuevas oportunidades tecnológicas.